El circuito de viaje por Islandia exige acostumbrarse al frío y a una tierra cubierta de nieve. La recompensa es notable: una espectacular oferta de atracciones naturales.
Viajar a Islandia te dará la posibilidad de conocer volcanes, termas y géiseres, pero su mayor característica son los coloridos cielos que regalan las auroras boreales. Aunque el fenómeno puede observarse durante todo el año, conviene visitar el país entre septiembre y marzo.
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Reikiavik
Ubicada sobre la cosa, la capital ofrece un circuito por Islandia centrado en la historia vikinga, con el Museo Nacional y el Museo de Saga. Otros paseos llevan al visitante a conocer la iglesia de Hallgrímskirkja realizada en cemento, y el domo giratorio Perlan, que con sus paredes de vidrio permite observar el panorama de la costa y las montañas.
Selfoss
A orillas del río Ölfusá, esta localidad ofrece un paseo imperdible para tu viaje a Islandia. Descubre las cataratas de Gullfoss y Seljalandsfoss, géiseres, volcanes y cuevas de hielo.
Akureyri
Viajando hacia el norte del país se encuentra la población bañada por el fiordo Eyjafjörður. En esta zona también abundan las cascadas y cañones, y en verano se pueden avistar ballenas. Por su ubicación, la localidad es ideal para observar las auroras boreales.